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domingo, 12 de marzo de 2017

un proyecto minero que vertería 240.000 toneladas de cianuro tóxico en sus tierras.

El parlamento de Rumanía ha parado un proyecto minero que vertería 240.000 toneladas de cianuro tóxico en sus tierras. Una cantidad de veneno suficiente para matar 80 veces a toda la población mundial [1]. Como respuesta, la multinacional minera está utilizando un sistema jurídico paralelo, exclusivo para inversores, para pedir 4.000 millones de dólares de indemnización. Ante tal amenaza, es posible que Rumanía tenga que ceder y aceptar una catástrofe medioambiental y humana.
Roxana Pencea Brădățan, una ciudadana rumana, explica lo que está pasando:
Los inversores aprovechan sus privilegios para socavar la democracia y el Estado de derecho. Los rumanos nos opusimos a la mina de Roşia Montană y nuestros tribunales la declararon ilegal. Sin embargo, a través de un sistema jurídico paralelo, una multinacional podría obligarnos a abrir de nuevo la mina o a pagarles miles de millones.”
Una nueva propuesta de la Comisión Europea crearía un inmenso sistema jurídico paralelo de este tipo. Si nuestros políticos la aprueban, todos los europeos nos veríamos inmersos en situaciones similares a la de Rumanía.
Pero tenemos la oportunidad de bloquear esta ofensiva antes de que sea demasiado tarde. Se está celebrando una consulta popular previa al inicio de las negociaciones - pero faltan pocos días para que termine. ¡Aprovechemos la consulta para mostrar nuestra oposición a darle más privilegios a multinacionales e inversores! El último día de la consulta, nos personaremos en Bruselas y entregaremos todos vuestros mensajes a la Comisión.
Actúa ahora para bloquear esta nueva ofensiva del poder corporativo mundial
Ante la ola de movilizaciones en toda Europa en contra del TTIP, del CETA [2] y de la proliferación de sistemas jurídicos paralelos donde poder llevar a juicio a nuestras democracias, las multinacionales e inversores han puesto el piloto de alerta. Recientemente, casi 150.000 personas participaron en otra consulta popular para mostrar su rechazo a estos privilegios. Por eso el poder corporativo ha cambiado de estrategia y ahora presiona para crear un sistema jurídico paralelo a nivel mundial al que ha dado otro nombre [3].
El sistema legal propuesto es diferente al de los tribunales tradicionales y a nuestros sistemas jurídicos democráticos. Su objetivo es el de permitir que las multinacionales impugnen cualquier ley que afecte negativamente los beneficios que esperan. De hecho, la empresa minera no está demandando a Rumanía por pérdidas de 4.000 millones de dólares, sino por los beneficios previstos que no se materializarán.
Si se expone a los gobiernos a la amenaza de poder ser demandados, empezarán a cambiar su modo de tomar decisiones. Las exigencias de las multinacionales tendrán mucho más peso. Por si fuera poco, todo esto costará mucho dinero, y serán la ciudadanía y el medio ambiente quienes paguen.
Únete a la lucha de millones de europeos en contra de este sistema jurídico paralelo que da aún más privilegios a las multinacionales e inversores. Ahora que la Comisión Europea nos pregunta qué pensamos al respecto, tenemos la oportunidad de que nuestra voz se tenga en cuenta. ¡Pero solo tenemos hasta el próximo martes! No lo dejes para luego. ¡Firma ahora!
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